¿Qué piensa un equilibrista cuando apenas le faltan unos pocos centímetros para completar la cuerda floja? ¿A qué imagen mental acude el malabarista cuando ya todas las bolas están en el aire y solo queda confiar en que la cuestión saldrá bien? ¿Se considerará Marcelo Tinelli el gran prestidigitador de la pantalla chica, un dueño de circo más eficaz que el circo mismo? Como quiera que se resuelvan estas preguntas, lo cierto es que esta noche se realiza la última función. Tras una temporada convulsionada, más incómoda incluso que aquel primer año fuera de Telefe, "ShowMatch" baja el telón, aunque no tan bruscamente como habían avizorado los críticos más pesimistas. Hernán Piquín y Noelia Pompa de un lado, y Magui Bravi y Jorge Moliniers del otro, se cruzarán en el combate final. Será la definición del campeón, los últimos bailes de la última gala, pero, ante todo, será para Tinelli el desahogo definitivo, su chau chau chauuu más relajado, porque mañana no habrá que pensar si el manotazo más efectivo para hacerle frente a la competencia será una maratón gay, un minicampeonato de fútbol o una extranjera de tonada dulce o sensual (de todos modos, el programa de hoy ya estará libre de la sombra de su rival principal, "Graduados"). 


Más allá de los vaivenes a los que estuvo expuesto durante el año, "ShowMatch" puede felicitarse de no haber perdido la tensión ni la emoción que genera edición a edición su última semana. Tanto la gala en la que Piquín y Pompa se impusieron frente a Florencia Peña como la del martes, en la que Bravi aniquiló para siempre el impulso arrollador de Paula Cháves y Pedro Alfonso, han logrado buenas mediciones de audiencia, miles de votos para uno u otro bando y, sobre todo, momentos de mucha emotividad. Todo eso, seguramente, se incrementará esta noche, cuando los participantes bailen, la audiencia decida y Tinelli se despida. Será el reposo del guerrero hasta que el año que viene el circo afirme sus estacas y el público demande, nuevamente, que comience la función.

Los que quedaron en el camino
Paula Cháves
Lo intenta desde hace tres ediciones: en 2010 conoció a Pedro, en 2011 compitió con él y ahora, que bailaron juntos, eran favoritos. Pero se lesionó y debió ser reemplazada.

Pedro Alfonso
Fue el gran héroe en las últimas semanas, cuando -con Paula ya fracturada- tuvo que superar su propia lesión para no abandonar el certamen. El jurado aplaudió su esfuerzo.

Vanesa García Millán
La coach, que siempre tuvo alto perfil y que incluso podría ser participante del certamen el año que viene, sustituyó a Paula. Su experiencia no sirvió para salvar a la pareja.

Florencia Peña
Demostró que es mucho más que una actriz con salidas graciosas. "Agradezco haber derribado mis prejuicios para aceptar este trabajo", admitió, una vez eliminada. .

Matías Alé
Fue su mejor campaña de todas las veces que participó en el concurso. Su esfuerzo también fue muy valorado, ya que sufre un problema crónico en una rodilla. .

Federico Bal
Público y jurado coinciden en que ha sido una de las revelaciones. Él mismo aceptó que el certamen le hizo mejor en lo físico (sufría de sobrepeso) y en lo anímico.